Karina Ramirez Karina Ramirez

Humanismo y epidemia: la reinvención del hombre.

#Opinión de Alexander Naime

  • La pandemia ha puesto a la humanidad a enfrentar su propio destino.

La crisis ha sido global y ha afectado a todos.

No ha habido diferencias entre los distintos grupos humanos.

Ni el color de piel, ni la ubicación geográfica, ni el género ni el sistema de creencias han tenido un valor particular para enfrentar al virus.

Hoy sabemos que como especie, y más que nunca, somos todos iguales.

Ello nos obliga a replantear nuestro destino como humanidad, nuestra vida en comunidad y nuestra relación con la naturaleza.

Debemos reflexionar desde la filosofía, desde las religiones y desde nuestra vida cotidiana sobre el sistema de valores en los que descansan nuestras relaciones como especie para crear nuevos paradigmas que permitan sobrevivir en el futuro.

Hoy sabemos que el destino es más incierto.

El esfuerzo debe hacerse desde lo global, desde local y desde lo personal.

¿En qué tipo de mundo queremos vivir?, me pregunto.

Las cosas no pueden ser como antes. Esa es la primera gran lección que debemos entender.

Desde la política las elites dirigentes deben repensar el papel de los Estados, de los gobiernos para hacerse más solidarios a nivel global. Una crisis climática global solo significara más riesgos para la especie humana.

Desde lo local debemos construir relaciones más armónicas que permitan una convivencia más sana.

Desde lo personal y tal vez como pilar fundamental construir con base en el amor y la fraternidad. 

No sé si la humanidad pueda resistir otra pandemia como esta.

Nuestra sobrevivencia como especie esta en juego.

Pero sé que tenemos soluciones que podemos buscar en nuestra historia,  en nuestra memoria e imaginación colectivas

La filosofía del buen vivir de las culturas sudamericanas puede ser una buena referencia y es tan simple como el buscar un equilibrio entre la vida en comunidad, es decir, entre todos los hombres y la vida con la naturaleza.

Así de simple.

Debemos tener el valor de reinventarnos.